El olivo

En la antigüedad, el olivo era el árbol sagrado del dios Júpiter (Zeus) y de la diosa Minerva (Atenea). Este árbol fue plantado frente al templo, y de sus ramas se colgaron varias ofrendas, además, se tallaron sus estatuas, se creía que adornar el árbol con una corona de olivos garantizaría buena suerte. Cuando un árbol era alcanzado por un rayo, esto es símbolo de la ira de Zeus, y predice gran desgracia para la gente. Por ello los olivos eran tan valiosos, para los antiguos griegos, ya que sobrevive durante generaciones, como los mismos dioses, llegándose a considerar que es un árbol inmortal.

Más tarde, los antiguos descubrieron que las aceitunas, o el jugo obtenido de ellas, también podían usarse para protegerse contra los seres malignos que vivían en la oscuridad. Este aceite se utilizó para lograr la iluminación divina y liberar a las personas de la oscuridad de la noche. Una mecha empapada en aceite era la única fuente de luz artificial para nuestros antepasados.

 

El aceite de los usos mágicos

Esta es una planta milenaria y sus derivados en rituales mágicos y religiosos son de todo tipo. El olivo ha sido considerado sagrado e inmortal durante mucho tiempo. Es considerada una sustancia asociada a la divinidad, al aceite que se extrae del olivo se le atribuyen propiedades mágicas y sagradas. También, se dice que dio grandes poderes a los sacerdotes, profetas y emperadores ungidos con este aceite. Por lo tanto, hoy en día todavía se emplean en diversos procedimientos mágicos y ceremonias religiosas.

 

Hechizos y rituales con el olivo

Son muchas las ideas que se pueden conseguir para realizar hechizos y formas de usar el olivo y sus derivados. Acá te explicamos cuáles son los más conocidos:

ü  Olivo protector

Vierte el aceite de oliva en un frasco de vidrio perfectamente limpio, enciende el incienso de mirra a la derecha, un vasito de agua bendita a la izquierda y una vela blanca frente al aceite realizando el ritual. A continuación, sumerge el dedo gordo del pie derecho en el agua bendita y, consagre el aceite tres veces diciendo: “En el nombre de Dios Todopoderoso, consagra este aceite y bendícelo para usarlo en los ritos de protección”.

            Después de realizar el ritual tres veces, echa algunos granos de mirra en el frasco y déjalo intacto durante 21 días. Cuando llegue el momento, echa este aceite en los utensilios que utilices para los rituales de protección siempre que lo necesites. Ten cuidado de no contaminar el resto del aceite.

 

ü  El aceite derramado

Algunos creen que el aceite derramado es una fuente de desgracia. Para contrarrestar sus efectos nocivos, debes echarle un poco de sal en forma de cruz, o tirarla a un pozo y salir corriendo para que no escuches los efectos de ese grano en el agua. Otro método, que arroja a la calle 12 veces más agua que aceite, no se considera efectivo.

 

ü  La fortuna del hogar

Según una vieja creencia, cuando una pareja va a habitar una casa nueva, antes de introducir los muebles debe meter aceite y carbón para garantizar la felicidad conyugal, la fecundidad y el vigor físico. Colocarlo en medio de la casa es el más importante, porque equilibra el resto de la habitación, y pase lo que pase allí, para bien o para mal repercute en el resto de la casa. En el pasillo puede ayudar con la armonía y la comunicación. En la puerta de tu casa y al aire libre es genial. Sin embargo, ten cuidado donde vives, ya que requiere cuidados especiales y no crece bien en zonas muy frías. Y por supuesto tenlo en tu jardín.

El olivo y los santos

Los trabajadores que cultivan olivos tienen varios santos a los que acudir cuando necesitan proteger sus cosechas de calamidades imprevistas.

Santa Catalina: Se dice que el día de Santa Catalina 25 de noviembre sube aceite en los olivos.

San Pancracio: Es el patrón del olivo. Esto se debe a que la helada nocturna primaveral suele coincidir con su fiesta, el 12 de mayo.

San Nicolás de Bari: Los productores de aceite frecuentan y le rinden tributo a San Nicolás de Bari.

 

Símbolo del olivo y su fruto

ü  Longevidad o inmortalidad: El olivo puede vivir más de 2000 años, puede soportar condiciones muy adversas como el frío, las nevadas, el calor y la sequía y puede dar frutos. Sus hojas se renuevan constantemente y responden muy bien al injerto. Por todas estas razones es también un símbolo de resistencia.

 

ü  Curación: Al olivo y a su fruto siempre se le han atribuido propiedades medicinales, muchas de las cuales han sido científicamente comprobadas, así como, cada persona que de manera espiritual ha conseguido este beneficio. De hecho, el aceite es utilizado por todas las civilizaciones anteriores para la belleza y la cosmética, así como para tratar ciertas dolencias, siendo un símbolo innegable de paz. De hecho, las ramas de olivo se pueden ver en las banderas de varios países y organizaciones.

 

ü  Fertilidad: Para los griegos, los descendientes de los dioses nacían bajo los olivos, por lo que las mujeres que querían tener hijos tenían que dormir a la sombra. De hecho, la ciencia ahora está estudiando si el consumo de aceite de oliva mejora la fertilidad, entre otros beneficios.

El olivo es una de las plantas más respetadas en el mundo. El árbol de olivo más longevo, tiene más de 4000 años. Está ubicado muy cerca de la ciudad de Belén, en palestina. Posee una altura de 12 metros y un diámetro de 25. Es conocido como, Al-Badawi, que significa «el grande», y no es para menos, ya que llevaba 2.050 años en pie cuando Londres fue fundada. Contaba con unos 3.500 años cuando Colón llegó a América, y la Edad Media le cogió con unos 3.000 años. Unas cifras que hacen empequeñecer a cualquiera.

La magia del olivo se da porque es considerado un árbol inmortal dado que como vimos anteriormente puede permanecer vivo muchos años. Es gracias a esto que sea un hechizo, ritual o baño lo que quieras hacer con él, te proporcionará las maravillas de su divinidad. Tu aura será más pura y la prosperidad llegará de maneras inimaginables. Así que, realízalos con fe y energías positivas, para que la luz reine en tu vida.